Estaba pautada para las 18 horas la entrevista, pero el protagonista dejó la cortadora de césped a un costado y atendió gentilmente a Panorama Deportivo Transerrano dos horas antes, entre la tranquilidad de su casa en Villa Sarmiento y el cariño de su esposa (Yanina) y dos hijas (Camila y Alfonsina).
A punto de cumplir 39 años (14 de abril), Esteban Dei Rossi aún en la actualidad le dedica un tiempo valioso y una dedicación permanente al fútbol, como en aquellos viejos tiempos cuando vestía la camiseta de Defensores del Oeste de barrio Alberdi, casaca que luce con orgullo desde su vuelta a Villa Dolores.
A continuación, la entrevista completa con uno de los jugadores que, desde Liga Dolorense de Fútbol, llegó al fútbol grande de nuestro país, para que los villadolorenses lo pudiesen disfrutar a través de la pantalla chica.
¿Cómo fueron tus inicios en el fútbol?
"Arranqué en la escuelita de fútbol de Don Cortez a los nueve, diez años. Después me fui a Defensores, ahí hice, como quien dice, el trabajo de inferiores y a los 16 años ya me fui a Córdoba a Talleres en sexta división. Previo a mi paso a Talleres tuve una prueba en San Lorenzo de Almagro en Buenos Aires".
"Siempre me incliné por el fútbol y no en el arco precisamente, me gustaba jugar al centro (risas)".
Contame detalles de la prueba en San Lorenzo de Almagro
"A San Lorenzo me voy por intermedio de mi padrino, que tiene un amigo ahí y me consigue una prueba. Tuve dos ó tres entrenamientos y en la categoría mía estaban Orión, Saja y me entrenó el "Mono" Irusta. Tenía que volver, pero en el momento que debía regresar me salió la oportunidad para ir a Talleres".
El arribo a Talleres de Córdoba
"Me lleva el "Sapito" Peral, se me acercó y me preguntó si me gustaría una prueba en Córdoba y allá me recibió el "Chocolate" Baley en el hotel donde estaban concentrando".
"Me dijo: andá a la tarde que te voy a probar y jugué un partido preliminar con San Martín de Mendoza. Sin guantes atajé ese día, no tenía guantes, no sabía usarlos. Me fue bien, me acompañó el "Flaco" Bartolomei también".
¿Quién era tu ídolo de chico? ¿A quién admirabas o tenías de espejo?
"Mi ídolo en el arco es Chilavert, lo quería imitar. Tuve la posibilidad de conocerlo, me regaló un par de guantes. Puse la foto en twitter y me lo retwuiteo. Era ganador, le pegaba bien a la pelota, tenía buena ubicación".
"Después lo admiré mucho a Mario Cuenca, lo tuve como compañero, me tocó compartir plantel y trataba de hacer las cosas bien como las hacía él".
¿Cuál fue el mejor compañero que te brindó el fútbol?
"El "Negro" Avalos me marcó, me enseñó un montón tanto dentro como fuera de la cancha. Después tuve muy buenos compañeros, me sigo hablando, hemos creado una linda amistad y hasta el día de hoy nos comunicamos con Villavicencio, Deivis Barone, Azconzabal, Nico Aguirre, "Colo" Vega, Elías Bazzi, "Gato" Ramasco, "Anguila" Gutiérrez, Sotomayor, Roth".
"En el fútbol amateur Machuca, Suárez. Sigo aprendiendo y me han tratado muy bien desde que volví al fútbol de Dolores".
Mejor equipo que integraste a lo largo de tu carrera
"Tengo dos equipos que me tocó estar que me marcaron mucho porque eran grupos muy humildes, todos jugaban por la camiseta. Uno era Antoniana en la temporada 2006 - 2007, el 80 por ciento de jugadores salteños y el 20 por ciento de afuera que nos integramos re bien. El otro es Racing de Córdoba 2007 - 2008, la frutillita del postre no pudo ser porque perdimos la final contra Atlético Tucumán, pero ese grupo eran toda gente joven, todos pibes de 26, 27 años, un hambre de gloria bárbaro y todos de Córdoba".
Tu mejor momento en el fútbol
"En todos los clubes me he sentido cómodo, me han tratado muy bien, lo he disfrutado. Donde estuve muy bien, en mi mejor momento, creo que fue ahí en Racing de Córdoba, ese torneo. Me sentía bien, estaba bien, me había tomado la vuelta a Racing como una revancha deportiva y la verdad que anduve muy bien en ese torneo; es más, estuve casi ocho partidos sin que me conviertan goles. Me sentía invencible, como quien dice uno, con mucha confianza, teníamos un técnico (Bonetto) que no te podías relajar".
Mejor entrenador
"Los entrenadores que a mí me llamaban la atención, cómo trabajaban y que yo escuchaba mucho y disfrutaba de cada entrenamiento fueron varios. Me gustaba mucho el "Pato" Pastoriza, con mucha experiencia en el fútbol, aprendí mucho de él. Aprendí mucho de Mario Gómez, su forma de laburar. Aprendí de J.J. López, de cada técnico saqué lo mejor de cada uno. El "Tigre" Gareca, me tocó tenerlo de joven a él y era increíble escucharlo hablar, escucharlo dirigir una práctica. El mensaje que siempre pasaban era el correcto, igual que el "Chulo" Rivoira".
¿Cómo fue tu regreso al fútbol de Villa Dolores después de muchos años?
"Mi llegada a Dolores fue porque estaba trabajando en un cuerpo técnico con el "Chaucha" Bianco en Agropecuario y nos tocó irnos. A la espera de otro club, yo me vine a Dolores, se demoró la salida a otro club. Me armé acá, me puse a terminar mi casa y mi hija necesitaba un lugar fijo porque empezaba el jardín de cuatro obligatorio".
"Decidimos quedarnos acá, después nos salió Gimnasia de Mendoza, le dije que no, después le salió Chacarita, le dije que no. La idea era bajar un cambio de andar tantos años por tantos lugares, empezar a disfrutar otras cosas. Darle más importancia a tus hijos. La idea era no jugar más, pero uno siempre va a querer jugar teniendo 40, 50, 60 años (risas)".
"Era un buen momento de que mucha gente de Dolores, que no me había visto jugar profesionalmente, me vea jugar amateurmente en Defensores. Me establecí acá, ya me puse la escuelita de arqueros. La idea es ya quedarnos, pero uno no cierra las puertas nunca de poder salir de nuevo a trabajar con un cuerpo técnico".
Con tu experiencia, ¿porqué creés que los jugadores del fútbol de Liga Dolorense no llegan al fútbol grande salvo contadas excepciones?
"Para mí yo creo que la base de inferiores es fundamental para que puedan jugar en primera. Después, el convencimiento de cada uno. Hoy estamos muy, muy lejos de lo que es un fútbol profesional, sin ir más lejos de un Federal B. Está en las ganas de cada uno en ser un jugador de elite, de poder salir de su pueblo a cumplir su sueño de jugar al fútbol".
"Yo creo que material hay, pero no hay trabajo y, económicamente, necesitás. Acá no tenemos alguien que diga: bueno, voy a apostar al fútbol de inferiores para armar jugadores. A los que les ha tocado salir, lo han hecho con sus propias armas, por alguna virtud deportiva que han tenido".
"A mí me duele tanto y me encantaría que algún día, Villa Dolores tenga un equipo, no te pido primera división, pero si te pido un Argentino A, por lo que es la ciudad tan futbolera, por lo que hay jugadores que pueden estar en un Argentino A. Pero se tienen que portar como se porta un profesional, se les tiene que pagar para que no hagan otra cosa, que se dediquen solamente al fútbol, pero es difícil".
El retiro de la actividad
"Con el tema del retiro no lo he pensado todavía, tampoco lo voy a pensar mucho. Cuando diga basta, basta. En el caso de que llegue ese momento, seguramente voy a seguir con lo mío que es entrenar arqueros, que me encanta enseñar y después veré qué sale".
"Mientras el cuerpo me dé y las ganas las tengo, al fútbol lo voy a seguir jugando. Estoy contento donde estoy, me siento bien, entreno, me capacito todos los días para tratar de rendir todos los domingos. Es lindo jugar y disfrutar lo que uno hace y lo que hice toda mi vida: jugar al fútbol".
Talleres, Racing, Unión de Sunchales, Atlético Tucumán, Juventud Antoniana de Salta, Gimnasia y Tiro de Salta y Sportivo Belgrano de San Francisco disfrutaron de sus voladas de un lado al otro, de su profesionalismo y compromiso.
También, ya de forma amateur, Comercio en el Torneo Regional Federal Amateur 2019 y Defensores del Oeste se dieron el gran lujo de tenerlo entre sus filas y disfrutarlo en su casa, en su tierra, en sus orígenes, con su familia, amigos y quienes lo pueden compartir a diario.
Quizá cuando dejé el fútbol pueda subirse a un auto de rally para cumplir su sueño. Ahora, después de tanto camino recorrido, kilómetros y kilómetros detrás de su trabajo, pueda disfrutar a pleno de su familia, que lo acompañó y acompaña estoicamente en su carrera deportiva. El "Zeta" Dei Rossi para sus más íntimos. Esos que lo ven atajar en su terruño. Con su gente.
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