FUENTE: PDT - FOTOS ENRIQUE CHARRAS - ARCHIVO PDT
Métodico y obsesivo de su trabajo, Mauricio Orzola, técnico de Comercio de Villa Dolores, último campeón del fútbol de Liga Dolorense, aprovechó el aislamiento social obligatorio por la pandemia del Coronavirus y dialogó "virtualmente" con Panorama Deportivo Transerrano. A continuación, la entrevista con el técnico que cambió la mentalidad de los protagonistas del fútbol local:
¿Cuándo y cómo surgió tu amor, tu dedicación para con el fútbol?
- "Al no haber podido jugar por distintos motivos, me vuelco en principio como ayudante del Gerente Deportivo de General Paz Juniors (Roberto Peralta en ese entonces); ahí me empiezo a involucrar con el club y con el fútbol en sí, (viajar con planteles, contratar hoteles, transporte, lugares de entrenamiento). También hice prensa del club y, de tanto compartir con técnicos, Dertycia me dijo que tenía que hacer el curso porque veía que me gustaba, que estaba todo el día hablando de fútbol, que lo veía bien. Un día me pasó a buscar por la ferretería que tenía en ese momento a una cuadra del club, me anoté y recibí en el 2009".
"Si bien transcurrieron diez años, he dirigido Federales en distintas provincias y el camino es largo. Gracias a Dios tengo el tiempo y me dedico solamente a esto, hago cursos, leo, miro videos, estudio y me capacito. Aprendí mucho siendo ayudante de campo y estoy en la edad justa en donde el técnico se puede desarrollar".
¿Con qué línea futbolística te identificas? ¿Menottista, Bilardista u otra corriente?
"Me gustan los dos y saco mi propio estilo, un mix entre ambos, más pensando en el arco de enfrente como Menotti y mantener mucho el orden como Bilardo. A los dos les ha ido bien: uno fue campeón del mundo siendo defensivo y ordenado y el otro fue campeón del mundo jugando con todos en ofensiva. Trato de sacar lo bueno que voy viendo de todos los técnicos en general. Tenés que trabajar muchísimo, hoy no te sirve copiar, podés copiar el movimiento, la idea, pero después tenés que adaptar el trabajo para que te salga en tu equipo".
¿Tenés un sistemá táctico definido, que te guste más o te adaptas de acuerdo a los jugadores que tengas?
"A mí como sistema en general, como funcionamiento, por ver equipos de primera línea, me gusta el 4-2-3-1 y después depende de los jugadores que tengas, de las necesidades del club donde vayas, en qué categoría juega, etc. Por eso, es tan cambiante el fútbol y es difícil que la primera idea que tengas la pongas en marcha y te salga. Lleva tiempo, trabajo, error. El fútbol es prueba y error constante. Por más defensivo u ofensivo que seas, siempre tenés que adaptar el sistema según la característica de jugador que tengas".
¿Por intermedio de quién llegaste al fútbol de Liga Dolorense y con qué te encontraste?
"Llego por una situación personal porque mi novia vive en Villa de Las Rosas. Después de mi paso por Santiago del Estero, en marzo del 2016 me instalo acá y tres meses después me surge lo de Catamarca (Villa Cubas). Ese año desaparece el Federal B, en donde me conocían y tenía chances de dirigir, por lo que me quedó solamente el Federal A, que es un salto grande y hay un abismo entre un torneo y otro".
"Sin torneos, empiezo a contactar gente acá en Dolores, yo no conocía a nadie, de hecho no había venido nunca a Villa Dolores. Por intermedio de mi novia, consigo el número de teléfono de Gustavo Salvay (presidente de Comercio) y también me acerca el número de un dirigente de Defensores. Los dos tenían técnico y comienzo a acercarme primero al club Sacachispas (Liga de la Costa), después al Atlético Las Rosas, para ver cómo trabajaban porque no conocía el fútbol de esta liga".
"Una noche llegó Jony Salvatierra y me dijo que estaban interesados en cambiar la parte futbolística de Comercio. Charlamos de fútbol y me presenta a Graciela (Vidales), de la Subcomisión de Fútbol y a ella le interesa la idea, el proyecto, porque yo le dije que a mí no me interesaba dirigir un campeonato, sino armar un proyecto. De esta manera, arranqué en julio del 2017".
¿Qué sueños tenés como entrenador?
"Uno ya viene cumpliendo el sueño de dirigir, de poder vivir de esto y estar todos los días al frente de un plantel. El sueño mayor es seguir creciendo y llegar a dirigir primera división".
Firma: Mauricio Orzola, 47 años, de Córdoba Capital. El que arribó a un fútbol desconocido y ya le imprimió su impronta: seriedad, trabajo, perfeccionamiento y sus amplios conocimientos en la materia.
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